Providence, RI (Pageacoag)
“Nosotros, el pueblo Narragansett, continuamos existiendo en esta tierra, la que el Creador nos reservó.” —Anciana Dawn Dove
Han pasado siglos desde los principios de la colonización en las Américas pero el proceso continúa. En Rhode Island, la guerra ecológica y el desalojamiento de la Nación Narragansett de sus tierras ancestrales han trastornado sus prácticas culturales.
La narrativa histórica dominante de Rhode Island no reconoce el carácter central de la tierra en los modos de vida Narragansett, acarreando como resultado un acceso desproporcionado a los recursos naturales vitales. A pesar de dichos traumas, la Nación Narragansett mantiene una relación con su tierra.
Para las comunidades indígenas, el acceso a tierra, aire y agua limpios no es cuestión de sobrevivir solamente sino también de identidad y espiritualidad. Abordar los problemas ambientales requiere comprender cómo las estructuras coloniales como la tenencia de tierras, la contaminación y la mercantilización de los recursos perjudican a las comunidades indígenas y a la Tierra. Esto puede lograrse mediante activismo comunitario centrado en las comunidades indígenas, tanto en Rhode Island como en el resto del país.